En 1976 Antequera vivió la clausura de sus últimas fábricas de mantas, vestigios de una pujante actividad que dio sustento a varias generaciones. Desplazada inexorablemente por el progreso, la industria textil es hoy un vago recuerdo que se difumina en la memoria de la ciudad. Con este libro, José Luis Sánchez-Garrido rescata esta parte fundamental de la historia antequerana gracias al valiosísimo testimonio de alguien que la vivió en primera persona, don Manuel Salazar Cobos, «hombre ponderado en sus comentarios, de mente clara y positiva, que a sus 95 años conserva una prodigiosa memoria y muchas ganas de vivir». En sus largas conversaciones, además de «aprender mucho y ganar un apreciado y estimado amigo», Sánchez-Garrido halló en los conocimientos transmitidos por su interlocutor la base sobre la cual esbozar el retrato de aquella época. Por ello, en señal de homenaje y agradecimiento, quiso que don Manuel figurase como coautor de la obra.
